La Sociedad de Activos Especiales (SAE) ofreció al INPEC, y anunció que entregará varios predios bajo su administración para ser usados como hospitales provisionales en los que se atenderán a personas privadas de la libertad durante la emergencia generada por el Coronavirus.
Uno de esos inmuebles es el edificio donde funcionó, durante 14 años, el famoso prostíbulo conocido como El Castillo, y que fue objeto de extinción de dominio por parte de la SAE en diciembre del 2018, ubicado en el corazón del barrio Santa Fe, zona de tolerancia de la ciudad de Bogotá.
La SAE le envió un completo informe al Instituto Penitenciario y Carcelario (Inpec) para, que de ser necesario, realice el respectivo traslado hasta este lugar a los internos de los centros penitenciarios y carcelarios de Bogotá que den positivo por Coronavirus.
El establecimiento fue ocupado en febrero de 2017 por la Fiscalía General con fines de extinción de dominio. La acción se realizó en el marco de la investigación que se adelantaba contra los narcotraficantes José Ricardo Pedraza Díaz y Carlos Manuel Medina Acosta.
La historia del establecimiento se remonta a 2003 cuando los mencionados capos del narcotráfico reclutaron a 40 trabajadoras sexuales y compraron un edificio de seis pisos patrimonio arquitectónico. Desde ese momento, el lugar se convirtió en el preferido por comerciantes, empresarios y narcotraficantes para gastarse sus fortunas.
La SAE igualmente puso otros bienes inmuebles ubicados en diferentes regiones del país para atender la emergencia del Coronavirus. Entre estos se encuentra el Hotel Mar Azul en San Andrés y el cual fue propiedad, hasta 1998, del narcotraficante Jesús Amado Sarria, conocido con el alias de ‘Chucho’, esposo de Elizabeth Montoya ‘La Monita Retrechera’, una de las principales protagonistas del ‘Proceso 8.000’ que vinculó al presidente Ernesto Samper.
