Un video que muestra a una modelo posando en ropa interior y con el torso desnudo en una de las calles más concurridas del centro histórico de Cartagena de Indias ha generado una ola de reacciones entre residentes, turistas y usuarios de redes sociales. La grabación, que se viralizó rápidamente, captura a la mujer en una sesión fotográfica, desatando un intenso debate sobre los límites de la libertad de expresión y el respeto al espacio público.
Las imágenes muestran a la modelo en una provocativa actitud ante un fotógrafo, mientras su ropa interior apenas cubre su cuerpo. En un momento del video, la modelo deja al descubierto sus pechos, provocando asombro e indignación entre los transeúntes y quienes presenciaron la escena. Este episodio, ocurrido el lunes 10 de marzo, ha vuelto a poner en el centro del debate la imagen de Cartagena como patrimonio cultural y turístico.
La creciente polémica se ha visto alimentada por el comportamiento de algunas modelos e influencers que utilizan el Centro Histórico de Cartagena como escenario para sesiones fotográficas cada vez más provocativas. Estas acciones han generado controversia en repetidas ocasiones, ya que muchos cuestionan el impacto que tienen en la percepción de la ciudad y en la convivencia pacífica de quienes la visitan.
Algunos defensores de estas expresiones argumentan que se trata de una manifestación de libertad artística y personal, resaltando la importancia de la autoexpresión en espacios públicos. Sin embargo, otros consideran que tales actos cruzan los límites del respeto hacia el espacio común y hacia aquellos que transitan por estas áreas históricas.
La situación ha abierto un diálogo sobre la necesidad de establecer pautas claras que regulen el uso del espacio público para evitar futuras controversias. A medida que las redes sociales continúan amplificando el debate, la comunidad cartagenera enfrenta el desafío de encontrar un equilibrio entre la libertad de expresión y el respeto por el entorno cultural que representa su ciudad.
