Dairo Antonio Úsuga David, más conocido como alias ‘Otoniel’, es el máximo jefe del -Clan del Golfo-, red delictiva que mueve toneladas de cocaína desde Colombia a Centroamérica y los Estados Unidos, y el narco más buscado en el país.
Estados Unidos ofrece por Úsuga David, más conocido con el alias de Otoniel, la suma de 5 millones de dólares, mientras que las autoridades colombianas ofrecen una recompensa de 3 mil millones de pesos por información que facilite su ubicación y captura.
Úsuga hizo parte del Ejército Popular de Liberación (EPL) desde los 16 años y de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), según las autoridades maneja sus propias rutas para la producción y tráfico de drogas y está involucrado en la minería ilegal, extorsión, microtráfico y contrabando.
Hace poco, el diario El Tiempo informó que tuvo acceso a un informe de inteligencia de la Policía Nacional sobre la situación actual de ‘Otoniel’, y reveló que Úsuga vive huyendo y escondiéndose sin poder ser atendido por su diabetes, enfermedad que, aparentemente, lo tiene en graves condiciones.
“Está aislado completamente, enfermo de diabetes. Enfermedad que le ha ocasionado problemas renales y que, de acuerdo con fuentes humanas, él no ha podido acceder a la atención que requiere y a los medicamentos, y más, porque contra él y su organización se mantiene la operación Agamenón”, dijo un oficial a diario.
‘Otoniel’, quien podría ser considerado como uno de los hombres más ricos del país y del mundo debido al tráfico de cocaína especialmente hacia los carteles mexicanos, vive escondido en el Nudo de Paramillo, Córdoba, «en condiciones deplorables, aunque esta acostumbrado a vivir como un animal de monte, por su vida criminal», señaló el investigador.
Úsuga David, de acuerdo con las autoridades policiales, tiene al menos 120 procesos abiertos por múltiples crímenes y una circular roja emitida por Interpol por homicidio múltiple agravado, secuestro múltiple agravado y concierto para delinquir.
Dairo Antonio Úsuga David y la organización del ‘Clan del Golfo’ libra una guerra territorial con los ‘Caparros’, especialmente en en bajo Cauca antioqueño y parte de Córdoba, lo que ha mantenido a ‘Otoniel’ replegado en el Nudo de Paramillo, especialmente entre la zona rural del municipio de Ituango, Mutatá, Chigorodó y Carepa, que limitan con Tierralta, Montelíbano y Puerto Libertador, en Córdoba.
«Allí, la organización ha adaptado varios cambuches para que ‘Otoniel’ y sus hombres pernocten, no pasan más de una noche en el mismo lugar. Están bajo la zozobra de ser capturados o muertos en medio de una operación de la Policía», aseguró el oficial al medio impreso.
Aunque Úsuga lidera una organización criminal de más de 200 hombres, solo 12 personas serían de su entera confianza y son quienes conforman su anillo de seguridad más cercano. “Él sabe vivir y cuidarse en el monte. No deja mover para nada a los hombres que lo acompañan; es muy desconfiado con su seguridad. Alrededor de él hay otros anillos de seguridad”, detalló el oficial al medio.
Para poder manejar los hilos de la poderosa red de narcotráfico, Úsuga David no maneja equipos de comunicación, cuenta con un servicio de correo humanos, modelo que usa para no ser interceptado por los organismos de inteligencia, quienes lo buscan hace más de tres años y lo han convertido en su principal objetivo para este 2021.
? EL TIEMPO tuvo acceso a un informe de inteligencia de la Policía Nacional sobre la situación actual de 'Otoniel', el capo del narcotráfico que es el objetivo número uno de la Fuerza Pública para este 2021.
Aquí le contamos los detalles. ➡️ https://t.co/9pwKKw5PNa pic.twitter.com/z2wHGU7anp
— EL TIEMPO (@ELTIEMPO) January 2, 2021
Los encargados de llevar estos mensajes cargan con memorias USB y grabadoras de voz desde los que ‘Otoniel’ dicta sus órdenes, pues su voz es la clave de la veracidad del mensaje para su círculo cercano.
Los hombres encargados de la seguridad de ‘Otoniel’ pagan todo en efectivo y el dinero viene directamente de las oficinas de cobro que mantienen en Medellín y Bogotá. Además, están utilizando el llamado token, “el pago mediante mercancía de contrabando que ingresa al país por diferentes lugares”.