La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) formuló pliego de cargos en contra de Bavaria para determinar si esta implementó una estrategia orientada a obstruir el acceso o expansión de nuevos competidores en el mercado de cerveza.
La estrategia habría consistido en el aumento significativo y desproporcionado en el uso de cláusulas de exclusividad con establecimientos de comercio dedicados a la venta del producto para consumo directo. Con esta estrategia Bavaria habría obstruido el crecimiento de sus competidores en el mercado de cervezas.
De acuerdo con la SIC, el comportamiento investigado pudo afectar a los consumidores del producto, pues los habría privado de los beneficios que ofrece un mercado en competencia con la entrada y/o expansión de nuevos competidores, más opciones, mayor diversidad de productos y mejores precios para los consumidores.
El caso
Debido a una queja presentada por Central Cervecera de Colombia S.A.S. ante la SIC se inició la investigación la cual evidenció que Bavaria incrementó de manera exponencial el uso y aplicación de cláusulas de exclusividad como reacción a la entrada en operación de la planta de producción de Central Cervecera de Colombia.
Así mismo, la Superintendencia encontró pruebas que sugieren que la intención de Bavaria habría sido obstruir el crecimiento de ese competidor, así como que las exclusividades que Bavaria implementó habrían logrado ese resultado en algunos canales de comercialización.
Teniendo en cuenta esas conductas, la Superintendencia imputó a Bavaria al haber incurrido en abuso de posición de dominio, práctica prohibida por el numeral 6 del artículo 50 del Decreto 2153 de 1992.
Así mismo, se imputó a José Luis González Quiroz, quien presuntamente habría colaborado, facilitado, autorizado, ejecutado y/o tolerado el abuso en el que habría incurrido la compañía.
La SIC podrá imponer multas hasta de 100 salarios mínimos vigentes por cada infracción al régimen de libre competencia. Y a quienes hayan colaborado, facilitado, autorizado, ejecutado y/o tolerado las conductas anticompetitivas, hasta 2.000 salarios mínimos por cada infracción.
Bavaria responde.
La empresa respondió a la decisión de la entidad diciendo que “el cumplimiento de las normas de libre y leal competencia ocupa un lugar preponderante, y contiene herramientas orientadas a impedir que sus políticas comerciales impacten de forma negativa el mercado o los competidores”.
La Superintendencia de Industria y Comercio anunció que abrió un pliego de cargos contra Bavaria para determinar en un análisis de competencia si la empresa ha implementado estrategias que busquen obstruir el acceso o expansión de nuevos competidores. https://t.co/i6izrrngqw
— Asuntos Legales (@asulegalesLR) April 27, 2022
Además la compañía se defiende diciendo que, en noviembre de 2021, el Tribunal de Bogotá emitió un fallo a su favor “respecto a este mismo asunto, el cual se encuentra en firme, en el que concluyó que los pactos de exclusividad que ha firmado la compañía con sus clientes no son desleales ni anticompetitivos”.
“La compañía es respetuosa del ordenamiento jurídico y de las decisiones de las autoridades. En este sentido, respeta la decisión informada, más no la comparte, razón por la cual procederá a ejercer su derecho de defensa en el marco de la investigación”, puntualizó Bavaria en un comunicado.